Hace poco hice una visita a la unidad de prevención de cáncer de mama del hospital de Gandia y encima de la mesa de la sala de espera, además de folletos informativos, había 4 tipos de cuestionarios: uno para que la gente pudiera expresar agradecimientos; otro para plantear quejas; un tercero para sugerencias; y una encuesta de satisfacción por el trato recibido.
Creo que es una iniciativa magnífica. Dar a las personas la posibilidad de expresar no sólo lo que no ha estado a nuestro gusto, sino también de premiar lo que se ha hecho bien.
Y es que son muchas las ocasiones en las que nos expresamos con enfado cuando nos hacen esperar, la comida no está buena o el trabajo no está bien hecho, y no hacemos lo mismo cuando las cosas están hechas correctamente.
El otro día el encargado de una empresa de la zona, me decía que no tenía por qué comentar nada a sus empleados si su trabajo estaba bien hecho porque esa era su obligación. Y sin embargo si lo hacemos, si comentamos a la persona lo rápido que nos ha entregado lo que le habíamos solicitado o lo paciente que ha sido al tratarnos; mejoramos su autoestima y su motivación para seguir haciéndolo de ese modo. Así que ¿por qué no hacerlo?